El ex boxeador Rubin Hurricane Carter, que pasó casi veinte años en prisión en EEUU por tres asesinatos que no cometió y cuya historia inspiró una famosa canción de Bob Dylan, falleció este domingo en Toronto (Canadá) a los 76 años de edad, tras una larga lucha contra un cáncer de próstata. Carter, que nació en 1937 en la localidad estadounidense de Clifton, empezó a boxear al alistarse en el Ejército norteamericano. Pero tras su baja, Carter pasó cuatro años en prisión por robo.
Después de salir de la cárcel, en 1961 regresó al boxeo para convertirse en profesional del peso medio. Carter parecía tener un prometedor futuro tras acumular más de una docena de victorias, en su mayoría por KO, lo que le valió el apodo de Hurricane. Pero en 1966 Carter fue arrestado junto con un amigo y acusado del asesinato de tres personas en Nueva Jersey. Tras un rápido juicio, Carter fue condenado a tres cadenas perpetuas por un jurado compuesto exclusivamente por blancos. Tanto Carter como su amigo John Artis negaron en todo momento su implicación en los asesinatos, pasaron sin problemas un detector de mentiras y los testigos no les reconocieron como los autores.
OPINIÓN PERSONAL
Casi 20 años tirados a la basura por un puñado de racistas.En vez de rabia y asco Rubin intento salir adelante formándose como su propio abogado leyendo libros sobre derecho entre los barrotes de su fría jaula
Podéis conocer más de esta persona en documentales y la película.